Archivos diarios: 2 diciembre, 2016

Descuentos

rajoy-y-susana

Casi todos los males y catástrofes de la historia, proceden de no percatarse a tiempo de lo que ocurre. De mantenerla y no enmendarla.

Por eso, llamar «reforma» al recorte, incurre en doble pecado: el de la hipocresía y el del error.
Aquí la codicia se alía con la ceguera, en un tándem que no es nuevo en la historia, y que a lo largo de la misma ha proporcionado crisis muy vistosas, cuando no inesperadas revoluciones.

El gobierno del PP, cuando no tiene en frente a nadie que le pare los pies, gasta y derrocha ideología y programa durante todo el año, sin cuidarse si es otoño o verano, diciembre o enero, con total alegría y sin mirar atrás, donde por cierto, van quedando no pocos cadáveres en el camino, porque -es sabido- si algo genera su ideología, es mortandad. Por pobreza energética, por pobreza infantil, por pobreza laboral, capítulos y deshonras en los que, como nadie ignora, batimos todos los récords.

Es el solipsismo propio del poder absoluto. Y es que en España, ni los contrapoderes ni la división de poderes han funcionado, engañados como hemos estado por un bipartidismo infame, que parásita y anula todas las divisiones teóricas del poder democrático del Estado.

Cuando enfrente lo que hay es una oposición fofa y de puro teatro, pactada para repartirse los pasos de escena, los pesebres, y los cromos, entonces hay que seguir el guion que dicta la farsa, y al menos guardar las formas y cuidar las apariencias.
Quiere decirse que se entra en un periodo de “rebajas”, al que gustosamente se acogen unos y otros, neoliberales de verdad y socialistas de pega, para vender de nuevo su mercancía averiada a precio de ganga.

Entramos en periodo de descuentos, donde lo que se compra y se vende es de manifiesta mala calidad.

Así el PP, aprovechando sin escrúpulos un triste deceso, le pide a C’s (que es un cero a la izquierda que cuando se le ordena puede sumar) un “descuentillo” en el tema de la corrupción, y un margen un poco más cómodo para el derecho congénito al delito. Es decir, una prorroga al derecho de pernada, aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid.
Otra cosa sería que se lo tuviera que pedir a Podemos. No creo que se esperarán a recibir la respuesta, porque la conocen de antemano.

Otro tanto ocurre con la cómoda y falsa oposición del PSOE (la gestora de Susana Díaz), que al PP y a Merkel les viene como anillo al dedo.

Cuando por iniciativa del parlamento y una incipiente activación de los sindicatos, parecía que se estaba en el camino de lograr unos mínimos (entre otros, el salario mínimo) que nos acercaran o igualaran a los niveles sociales que se estilan en Europa, y que nuestra Constitución ordena sin que la hagan caso, el gobierno, con la inestimable ayuda de la gestora neutral de Susana Díaz, frustra la operación, y de la esperanza primera se pasa a la decepción final, porque con tal ganga y rebaja opositora, lo único que se obtiene son migajas que ni alimentan ni sacan de pobre.
Y así todo.

¡Triste legislatura nos espera!

Aunque podía ser peor: imagínense al PP, al PSOE, y a C’s a solas consigo mismos, participando del mismo cotarro y bebiendo del mismo pesebre, sin una oposición que los controle.
Si ese fuera el caso -que no lo es gracias a Dios y al voto- ya a estas alturas -y acabamos de empezar- los esclavitos españoles estarían siendo clasificados por colores y el tamaño de las orejas.
¡Porque clase media ya no la hay!

Dicho en pocas palabras: continúa el teatro.